Finalmente el coronel (r) de la Policía Benjamín Núñez confesará que dio muerte a tiros a tres jóvenes en Chochó, Sucre en retaliación por el homicidio de un patrullero de la institución a manos del ‘Clan del Golfo’.

También pedirá perdón por este hecho de sangre lamentado en todo el país, y testificará contra 10 policías implicados en la matanza.

Esto quedó establecido en un preacuerdo que suscribió Núñez con la Fiscalía, y que en los próximos días será presentado ante un juez para su aprobación.

La semana pasada se conoció que el uniformado pagaría una pena de 29 años de prisión, pero en las últimas horas se concretaron otros detalles de esa negociación judicial que contempla el pago de una multa de 100 salarios y se compromete a ser testigo de cargo del ente acusador, lo cual podría reducir la condena carcelaria.

El oficial en retiro reconoce que disparó en siete ocasiones contra las víctimas.

“Pedir perdón públicamente a las víctimas, al país, a la comunidad y a todos los que sufrieron perjuicio con su actuar”, dijo Núñez en el preacuerdo.

Aníbal Garay, apoderado de dos de las familias de las víctimas, no está conforme con el preacuerdo, y declaró que el exoficial “merece la pena máxima, 60 años, y si llegara a un preacuerdo nosotros pediríamos 40 años”.

En tanto Benjamín Núñez fue enviado a la cárcel de Picaleña, en Ibagué, como medida preventiva mientras se desarrolla el proceso judicial.

Dijo que aceptará los delitos de homicidio agravado, privación ilegal de la libertad, y alteración o destrucción de pruebas.

La matanza de estos jóvenes ocurrió el 25 de julio de este 2022, y se les identificó como Carlos Alberto Ibáñez, Jesús David Díaz Monterroza y José Carlos Arévalo.

Fueron señalados, injustamente, de participar en el homicidio de un patrullero de la Policía ocurrido en el municipio de Sampués, Sucre, durante el ‘Plan Pistola’ de la organización criminal el ‘Clan del Golfo’.